LA CONCIENCIA UNIVERSAL ES LA FUENTE DE LA INTUICIÓN Y LA SABIDURÍA

El yoga, más precisamente la meditación, nos hace volver a nuestra verdadera naturaleza cuántica, expandiendo la conciencia hacia lo indivisible, el llamado estado de superconciencia, en el que se produce la percepción de la unión.
Así, es posible explicar por qué el conocimiento intuitivo obtenido a través de la meditación es diferente del conocimiento analítico relacionado con la razón.
La intuición no surge al confrontar pensamientos, recuerdos, evidencias, cálculos o cualquier tipo de procesamiento de datos de la mente, sino solo al conectarse directamente con la fuente ya existente de todo (la conciencia universal).
Al despejar la mente del torbellino de pensamientos, la meditación deja solo lo esencial, que es nuestra verdadera esencia, la totalidad.
Surgen así múltiples potencialidades, sabiduría intuitiva y serenidad, ya que la intuición genera sabiduría, a diferencia de la razón que construye conocimiento analítico a través del estudio.
La sabiduría es una forma de conocimiento práctico, es decir, ajeno a la razón, en el que no hay duda, sino certeza en el actuar.
