
Tradicionalmente hemos identificado el corazón con la parte emocional de la persona, con la calidez, mientras que al cerebro le asignamos las características más racionales o de mayor frialdad. Pero en la realidad no es del todo así. El corazón tiene su cerebro y el cerebro su corazón. Y no sólo eso, sino que dialogan […]
Corazón y cerebro: historia de una amistad